lunes, 6 de abril de 2009

Lunes

Hoy fue un lunes típico. Para que un lunes sea típico tiene que haber un desorden en el reloj biológico. ¿ A quién no le pasó eso un lunes? Yo no soy la excepción. Vengo de acostarme tarde los fines de semana y el lunes llego a dormir con suerte unas 5 horas por culpa del maldito reloj biológico y de mi cuerpo al que no se le ocurre agarrarle sueño a una hora razonable. Pero pensándolo bien, la culpa la tengo yo. Si, creo que si... Pero como dice ese viejo dicho, calavera no chilla...
Que día feo el lunes... hasta el nombre no es muy lindo. El que lo nombró seguro que lo pensó todo, no puede haber tanta casualidad. Porque si te ponés a pensar, hay nombres de días que son más agraciados.
Para colmo el que hizo el calendario de mi colegio se habrá puesto a pensar, para que un lunes sea lunes tiene que tener las peores materias y entonces mandó 2 horas de biología, 2 horas de matemática, 1 hora de Hopfman. Todo en el lunes, como para que a ningún desprevenido le quede alguna duda de que el lunes es el peor día de la semana.

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